Puno. En todos estos años, donde uno puede sentir presencias extrañas, muchas fueron las preguntas de por qué se quedan en esta dimensión terrenal y no simplemente se van, partiendo a lugares que difícilmente puedan existir. En todo ese tiempo de preguntas, fueron también muchos los argumentos e hipótesis recibidos, algunas mencionaban que estas almas o espíritus estaban retenidas en este espacio tangible porque hicieron tanto mal en vida, fueron personas que mataron, abortaron o hicieron un mal irreparable que se condenaron y necesitan expiar sus culpas para luego irse en paz.
Necesitan caminar por distintos lugares y me pregunto si esa es la razón de que en ocasiones los encuentro con toda la ropa rasgada y vieja, el pelo largo además de las uñas crecidas, gritando como si lloraran.
Pero el tipo de muerte como los suicidios, en su mayoría, tendrán la disconformidad de la sociedad y por lo tanto la de Dios, Es entonces que surge la explicación de que esta muerte no fue un designio del supremo y se condenaron de la peor manera, ellos no tendrán el descanso y rondarán por siempre, radical pensamiento.
Otras más sacadas de guion de películas como las muertes violentas como asesinatos, hacen que el ánimo de la persona violentada busca una especie de venganza, su muerte no fue tranquila y por lo tanto se resiste a abandonar la tierra hasta que su “cuenta” esta saldada, deambula por distintos lugares, asustando a las personas.
Y están otras como los accidentes de carretera, donde no se estaban preparado para irse de esta forma, entonces surge la teoría de que si murió allí, es muy posible que busque el alma de otra persona para poder liberarse y poder irse tranquilamente, de esta forma hace que nazca una cadena de accidentes en el mismo lugar que parece dar razón a esta teoría alimentada de generación en generación. Como una especie de guardianes de las carreteras esperando que alguien tome su lugar, espíritus alargando la mano con el afán de que un auto los recoja ya sea de día o de noche o simplemente esperando en el mismo lugar donde murieron o presentes en algún accidente, mirando sin que las personas les presten atención. Siendo esta la que llama mi atención.
Los accidentes de carretera, son situaciones donde se experimenta distintas emociones y situaciones, unos más trágicos que otros, las personas se encuentran con desesperación tratando de preguntar que es lo que ha ocurrido, ellas vienen y van buscando familiares, lloran asustadas y es precisamente esta la descripción de un accidente de auto vivida en persona, donde el carro, que tome para regresar a casa, precisamente una combi, tuvo un accidente. Era tarde y una pequeña llovizna caía afuera, yo venia al lado de la ventana, no se precisamente que paso, venia dormitando; tal parece que otro auto invadió el carril, mi cabeza golpeo el asiento de adelante, mi nariz sangraba, el dolor invadía el lugar, la ventana de adelante estaba rota, todos salieron con mucho esfuerzo, otros autos pasaban y algunos se detuvieron para ver que pasaba, bajaban las personas para ayudar con los heridos, algunos hacían llamadas, yo trataba de que la hemorragia se detuviera mientras que alguien me preguntaba si me encontraba bien.
A un costado del pavimento, recuperándome del todo, vi a un señor sentándose a corta distancia mía, la acción me pareció extraña porque el pavimento estaba mojado pero él lloraba, se agarraba el rostro, supuse que fuera por causa del susto, quise acercarme pero los comentarios de que había una persona muerta hizo que me desviara, fui a ver que pasaba realmente, no pude creerlo era el señor que venia en el asiento de adelante y era el mismo que vi sentándose, gire rápidamente pero ya no estaba, lo busque con la mirada y fue en vano.
Ahora que por motivos de estudio paso por el mismo lugar del accidente, siempre recuerdo la mirada triste de aquel hombre resignado a las ordenes de la muerte y fácilmente este esperando otro accidente que cobre una vida para irse tranquilo, claro siempre y cuando lo que se diga sea cierta.